A 10 años de la creación del euro y a siete de su puesta en circulación, esa moneda llegará el 1 de enero de 2009 a Eslovaquia, el décimosexto país de la Unión Europea (UE) en adoptarla.
'El próximo año empezará con cerca de 329 millones de europeos llevando euros en sus bolsillos', más de la mitad de la población de la UE, señaló el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso.
Entre los 10 países del Este europeo que pasaron a integrar la UE en 2004, Eslovaquia fue el cuarto país en adoptar el euro, luego de cumplir con una serie de exigencias antes de ser aceptada en la zona euro.
Estabilidad de precios y del tipo de cambio, moderación de los tipos de interés, finanzas saneadas y una deuda pública contenida, son los criterios exigidos para que un país pueda adoptar la moneda única.
El euro es considerado en Bruselas el símbolo del mercado común europeo y la base para una economía sólida.
'El euro dio como resultado las tasas de inflación más bajas y las de interés más altas de todos los tiempos, dijo Barroso, al sostener una opinión que comparte el comisario europeo de Economía, Joaquín Almunia.
Agregó que la moneda única 'en la actual época de crisis está protegiendo a los empresarios de la volatilidad de las tasas de cambio'.
En menos de 10 años el euro se ha convertido en la segunda moneda de transacción y reserva internacionales, con una cuota del 25 por ciento de las reservas mundiales de divisas.
Sin embargo, en Eslovaquia, la llegada de la moneda común causó un miedo generalizado de que el cambio de divisa, fijado a 30,126 coronas por unidad, venga acompañado de un alza injustificada de los precios.
Para evitarlo, el gobierno estableció un 'código de ética' que los empresarios fueron obligados a firmar, comprometiéndose a respetar las 'reglas de cambio'.
Hasta el 1 de enero de 2010 los comerciantes están obligados a estampar los precios de productos y servicios en las dos monedas y la Inspección de Comercio Eslovaca vigilará para que la tasa de cambio aplicada sea la correcta. La corona podrá seguir siendo utilizada hasta el 16 de enero, aunque a partir del primer día del año los cajeros automáticos pasarán a dispensar euros y los comercios devolverán el cambio también en euros.Por otra parte, las oficinas bancarias seguirán cambiando las divisas hasta el 30 de junio, en el caso de las monedas, y el 31 de diciembre, en el de los billetes.
En el Banco Central el cambio seguirá hasta el fin de 2013 para las monedas y sin plazo para los billetes.
El emblema estatal (una doble cruz en medio de tres colinas), el castillo de Bratislava y el pico Tatra Krivan, símbolos nacionales, son algunas de las imágenes que estampan los billetes y monedas de euro eslovaco.
eep
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